Mapas llega a OS X

Mapas llega a OS X pisando fuerte y con una integración perfecta

No es la novedad más importante de OS X Mavericks, pero desde mi punto de vista se trata de una de las novedades más interesantes sobre todo si viajas bastante y te gusta planificar rutas, ya que la integración con los iDevices es perfecta.

Herencia iOS

La aplicación no esconde sorpresas y obviamente es lo mismo que nos ofrece Mapas en iOS. Con los mismos defectos de los mapas de Apple (pocos puntos de interés, algunos errores menores) y algunas virtudes que cada vez son más gracias al durísimo trabajo que está haciendo Apple, el cual está dando sus frutos como se puede ver por ejemplo en la captura de pantalla.

Al aprovechar toda la potencia de los procesadores de escritorio la vista tridimensional funciona de maravilla en las ciudades que disponen de ella, como por ejemplo es Madrid. Moverse con el trackpad es una auténtica gozada ya que la respuesta es inmediata, mientras que con el Magic Mouse lógicamente no estamos ante un proceso tan natural, pero igualmente la experiencia es buena. Hay que reseñar también que los mapas lucen de maravilla en pantalla Retina Display.

Planificando

Personalmente creo que la aplicación es ideal para realizar algunas pequeñas planificaciones de rutas, ya que con un simple toque de ratón podemos enviarla a un iPhone o iPad. Lógicamente aquí se beneficia muchísimo todo aquel que tenga dispositivos Apple, ya que si tienes un Mac pero luego usas un móvil con Android no podrás disfrutar de esta integración de Apple. La verdad es que a día de hoy creo que resulta poco interesante la opción de tener un terminal que no sea iOS si se tiene un Mac.

Podemos trazar rutas sin problema e incluso ver el tráfico en las ciudades que soportan este servicio, si bien en todos estos aspectos Google Maps sigue siendo referencia indiscutible. Para echar un ojo a las ciudades, movernos un poco y disfrutar planeando creo que Mapas es una interesantísima aportación a OS X, y con algunas mejoras a nivel de interfaz (la veo demasiado por defecto) será casi perfecta.